Este verano, Google lanzará una flotilla de vehículos autónomos, indicando que su producción en serie no está muy lejos. El obstáculo más grande que estos vehículos tienen es el límite de la libertad y privacidad individual.
Los ciudadanos de los Estados Unidos toman muy en serio su libertad y privacidad. El automóvil ha sido considerado como un símbolo de libertad personal y muchas obras de la cultura norteamericana han representado este importante aspecto de nuestra sociedad.
Un ensayo publicado en el Yale Journal of Law & Technology propone a los futuros legisladores pensar en la libertad, privacidad y las implicaciones de responsabilidad en relación a los vehículos autónomos. Al ser los automóviles más automatizados, la responsabilidad está recayendo más en los constructores y el gobierno. La posibilidad de un vehículo autónomo es algo atractivo para la mayoría de la clase media.
El debate entre la ciencia y los ideales filosóficos continuará con el avance de la humanidad. Muchos académicos importantes, ingenieros extraordinarios y líderes en la tecnología buscan el equilibrio entre las bases éticas, políticas y sociales para desarrollar y apoyar los avances tecnológicos sin deteriorar un progreso sostenible.