Como padres de familia, buscamos tomar las mejores decisiones para proteger a nuestros hijos. Una de las grandes ventajas del Internet, es la facilidad de comunicación. Muchos son los ejemplos en los cuales familias en los Estados Unidos mantienen esos lazos de unión con amistades y demás familiares en otras partes del mundo. Todo gracias a las redes sociales y mensajes cibernéticos entre otros. Pero también hay que reconocer los peligros del web y así, estar preparados.
Uno de los aspectos más importantes para proteger a nuestros hijos de los peligros del Internet, es aprender a utilizar la misma tecnología. Cuando los padres desconocen estas plataformas, se crea una distancia entre padres e hijos que se traduce en falta de autoridad porque los hijos son conscientes de que los padres desconocen la tecnología.
Se debe de usar el sentido común y no aceptar a extraños como amigos. Aceptar a desconocidos en las redes sociales puede ser peligroso para los menores de edad porque en realidad no se sabe si el perfil es de un menor como ellos, o de un adulto con malas intenciones. Es importante hablar con nuestros hijos y darles a conocer que nuestro interés como padres, es su seguridad, no el vigilar cada una de sus actividades.
Hay que establecer con nuestros hijos que toda fotografía que se comparte por Internet es guardada de por vida en servidores públicos o privados. Sin importar si se borra de la memoria de los equipos electrónicos que se utilicen. De manera que aquellas imágenes íntimas o inapropiadas, pueden caer fácilmente en manos de personas que pueden utilizarlas para violar la privacidad.
Es claro que la mejor medida de protección es la educación.