Para quienes han vivido en el Valle del Sol por algunos años, es notorio que durante el invierno, nuestra ciudad es un punto de atracción para los residentes invernales que nos visitan huyendo del frío de los estados del norte del país. El clima de invierno en Phoenix es agradable para jugar golf, visitar los diferentes sitios de atracción y mucho más. Por esto no es extraño que los snowbirds hagan de Arizona su segundo hogar.
En décadas pasadas, la mayoría de los residentes invernales solían manejar sus casas rodantes y estacionarse en los diversos parques para estos vehículos que aún puedes ver mayormente en las ciudades del este del valle. Este grupo de personas retiradas generalmente pasaban sus días paseando o jugando cerca del parque donde su casa rodante se encontraba y su visita en el estado no pasaba de más de tres meses.
Con el paso del tiempo, los residentes invernales han cambiado sus hábitos. Como cada generación, cada grupo es diferente, y los snowbirds no son la excepción. Hoy en día, muchos ciudadanos canadienses también hacen el viaje hacia el sur durante le temporada de invierno. Con una afinidad más relacionada con la aventura, los residentes invernales ahora realizan inversiones en propiedades vacacionales dejando atrás las casas rodantes y pasan más tiempo en el estado.
En los pasados 10 años, la compra de propiedades por parte de los residentes invernales ha ido en aumento y no solo se congregan en el este del valle. Scottsdale, Phoenix, Chandler y Glendale son áreas que han visto la llegada de este activo grupo. Arizona continúa siendo el lugar ideal para pasar el invierno.