En varias encuestas realizadas el año pasado, surgieron algunos datos interesantes entre los conductores hispanos en los Estados Unidos. Fueron dos los temas que se cubrieron en las encuestas: manejo agresivo y manejo distraído.
Las respuestas indicaron que dos de cada tres conductores hispanos han tenido experiencias agresivas estando detrás del volante en un lapso de tres meses. Los participantes respondieron que su actitud agresiva fue causada por embotellamientos de tráfico, llegar tarde al lugar donde se dirigían y encontrar áreas de construcción que detenían el flujo normal de tráfico.
El exceso de velocidad, cambiar de carril o adelantarse a otro vehículo de manera repentina y sin tener precaución, son algunas de las maneras de conducir que se estiman como manejo agresivo, y en la mayoría de los casos, resultan en accidentes. Las probabilidades de tener un accidente serio aumentan considerablemente cuando el conductor presenta un manejo agresivo.
De los conductores hispanos que participaron en las encuestas, aproximadamente un 37 por ciento asintió el haber enviado mensajes de texto mientras están detrás del volante. Un 54 por ciento respondió utilizar una aplicación de navegación al estar manejando y aproximadamente un 25 por ciento dijo enviar y leer correos electrónicos cuando conducen su vehículo.